por BK Sheilu
…La paz y la felicidad siempre están contigo, no las tiene que
pedir. Simplemente tienes que experimentar a través de la conciencia. Quien
experimenta felicidad no es el cuerpo físico, quien experimenta felicidad es el
ser espiritual, el alma, yo soy esa alma que es una personificación de
paz.
La Paz es mi verdadera naturaleza. Si
alguien no ha sido pacífico, el alma cuando deja el cuerpo (cuando muere el
cuerpo) donde quiera que vaya no estará feliz, se va a llevar consigo las
impresiones de esa falta de paz, de esa infelicidad. Es una verdad que hay que
entender. Por lo tanto, la felicidad no es el final del viaje, es
el viaje en sí. ¿Cómo seré capaz de experimentar eso? Cuando yo suelte, cuando ya no esté apegado,
estaré protegido ¿Sabemos protegernos de la tristeza? ¿Cómo suelto fácilmente?
Uno lo que dice es: “nada es mío, uno vino de manos vacías y se va de manos
vacías”.
Solo las acciones en la vida, son las
evidencias de lo que hiciste, lo que te llevas. ¿Cómo ir adentro? Ser consciente: soy un ser espiritual, soy
personificación de paz, de felicidad y de amor. Amor no es algo que se pide, es
algo que se da, está dentro de ti. Es tu
naturaleza amar.
La ira no es tu naturaleza, alguien puede decir la ira es mi naturaleza,
yo me enojo mucho; pero ¿es tu naturaleza enojarse o estar pacífico?
Nuestros valores en la vida son mucho más
preciosos que la salud y la riqueza y los perdemos tan rápido. ¿Cómo experimento
los valores de paz, de felicidad y amor? A través de esta conciencia: Yo soy un alma, un punto de luz divina, soy
un ser espiritual, he existido por siempre. Cuando pienso de esa manera nunca
voy a pedir por amor, paz y felicidad, sino que los doy. ¿Cómo? Los doy a través de mis pensamientos,
palabras y acciones. Pregúntate ¿son mis
pensamientos tales que están mandando vibraciones de paz a los demás? Si
alguien se enoja contigo y quieres acabar con su enojo, debes estar pacífico y
feliz. Si te enojas, es como echar combustible al fuego.
Separa un tiempo para ti mismo, así como
separas tiempo para cuidar tu cuerpo. Tiempo para uno mismo, es tiempo para el
alma, es tiempo para la introspección: ¿Por qué estoy en este mundo? ¿Cuál es
mi propósito?, ¿Dónde tengo que ir? Eso es lo que hacemos en meditación. Por la
mañana cuando despiertes has una reflexión ¿Por qué estoy aquí? ¿Qué voy hacer
todo el día?
La primera prioridad: Hoy voy a estar
feliz, no importa lo que venga.
Segundo pensamiento, haré a otros
felices. Hoy no me voy a enojar, hoy no
daré tristeza a nadie. La forma correcta de pensar es: Yo soy feliz, estoy
pacífico y debo compartir eso con todos a través de mis pensamientos, palabras
y acciones de manera positiva.
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