Madurez A medida que maduramos espiritualmente, hay menos necesidad de que nuestro respeto por nosotros mismos se refuerce con elogios y atención especial. A medida que nuestros procesos de pensamiento se vuelven más compasivos y menos obsesionados con nosotros mismos, nos sentimos cada vez más satisfechos con nosotros mismos y con nuestras vidas. Nos relacionamos con la gente más fácilmente y no sentimos la necesidad de llamar la atención sobre nuestros éxitos o quejarnos de nuestros problemas.
Vivimos según la filosofía de Supervivencia del más apto , que hace de la vida una lucha. La espiritualidad nos enseña que el que sirve es el más apto. En el mundo se nos enseña que el servicio a la humanidad es servicio a Dios. También nos enseñan la supervivencia del más fuerte. Esta creencia nos hizo competir con la gente en lugar de servirla. 1. Nuestra naturaleza original es ser generosos. Cuanto más damos, más fuertes nos volvemos. Si creemos que sólo sobreviven los más aptos, adoptamos el modo de tomar y desarrollamos un sentido de competencia y un deseo de dominar a los demás. 2. Nuestra mentalidad de supervivencia es una barrera para nuestra naturaleza de servicio. Pensamos que cuanto más acumulemos, más éxito tendremos y más satisfechos estaremos. Hemos acumulado mucho físicamente hoy, pero nos sentimos vacíos por dentro, debido al vacío creado al ir en contra de nuestra naturaleza de servir. 3. Medita diariamente y llénate para nutrir las cualidades de compartir, cuidar y c