Una respuesta positiva sencilla para romper el ciclo de intercambios de energía negativa con otra persona es la profunda comprensión interior de que, en ese momento, la otra alma carece de los tesoros de la paz y el amor. La base de esta comprensión debe ser una conciencia humilde.
A menudo, esta comprensión se basa en una conciencia egoísta que, en lugar de calmar la situación, la vuelve más volátil a un nivel sutil. Por lo tanto, esta comprensión me recuerda interiormente mi deber en ese momento: servir a la otra alma con los tesoros infinitos del amor y la paz de Dios.
Así, las donaciones puras en ese momento, en forma de vibraciones mentales positivas y constructivas, durante 5 minutos al día, actúan como un bálsamo calmante de amor y paz para la otra persona. A través de este método, tus sentimientos de ligereza, satisfacción y buena voluntad llegan a la otra persona con la que tienes un problema. Al hacerlo, estos sentimientos positivos transmitidos a la otra persona allanan el camino para que esta reconozca su negatividad.
Esta negatividad se manifiesta en forma de debilidades y acciones incorrectas, si las hubiera. Esta comprensión sirve como motivación para el cambio. Además, conectar con la otra persona con un rostro alegre y brindarle una compañía entusiasta, llena de sentimientos de dulzura, felicidad y satisfacción, genera transformación en ella. Esto se debe a que nuestras acciones se convierten en maestros para la otra persona, que se vuelve más humilde y se inspira en una actitud amable y positiva.
Además, las donaciones en forma de palabras humildes y amables, pocas pero valiosas, ayudan a poner fin a los intercambios de energía negativa. Además, generan las bendiciones y los buenos deseos de la otra persona, así como de las personas relacionadas con la situación.
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