Ser un buen simpatizante simplemente no significa desear lo mejor a los demás. También significa tener buenos deseos para uno mismo y tener el deseo puro de lograr un cambio para mejorar en uno mismo.
Entonces, sea cual sea el tipo de situaciones, en lugar de solo juzgar a los demás y lo que necesitan cambiar, el que desea lo mejor constantemente genera una transformación en sí mismo.
Por haber trabajado en mí mismo en todas las circunstancias y haber utilizado cada
situación como una oportunidad para el progreso personal, disfruto
constantemente cada cosa que se me presenta.
No tengo expectativas, solo pienso
en el beneficio para los demás y para mí mismo. Entonces nunca encuentro
ninguna situación como un obstáculo, sino que la uso como un paso para
progresar.
Comentarios
Publicar un comentario