Ir al contenido principal

Superando límites y barreras mentales (Parte 2)

Una reducción significativa en nuestra tasa de éxito para salir de situaciones difíciles se debe a la confusión o la falta de convicción positiva. Esta falta de positividad es causada por diferentes tipos de posicionamientos de la mente que son perjudiciales para nuestro poder de determinación o de fe . 

Conoces la historia del elefante al que desde pequeño le ataban una pata con una pequeña cuerda y experimentaba una falta de libertad para moverse donde quisiera. A esa edad, la pequeña cuerda era suficiente para atar al elefante. A medida que el elefante crecía, poseía la fuerza física para romper la cuerda y vagar libremente, pero en lugar de hacer uso de su fuerza para romper la cuerda, no lo hizo. Permaneció confinado en la misma pequeña región donde solía estar atado porque su mente estaba condicionada a que no podía romper la cuerda, lo cual es un ejemplo de limitación mental. 

De manera similar, la región interna de nuestra mente es el lugar donde nosotros, cuando éramos niños, nos acostumbramos a estar atados con los diferentes tipos de cuerdas de la falta de optimismo o positividad. Por ejemplo, no puedo hacerlo bien o no soy lo suficientemente bueno o no tengo tanto éxito como los demás o tengo poca confianza en mí mismo o tengo un bajo rendimiento. Estas cuerdas en muchas personas son tan fuertes que llega un momento en que situaciones de éxito han llegado a su vida en diferentes formas a medida que han ido creciendo y han logrado logros razonables en diferentes esferas de la vida. 

En ese momento podrán romper fácilmente estas diferentes cuerdas, pero aún mantienen poco optimismo. Esta falta de optimismo restringe su libertad para tener éxito y su capacidad para lograr mayores logros y alcanzar el potencial que poseen y como lo esperan sus amigos y personas cercanas. 


La razón por la que nuestro potencial oculto permanece sin explotar en la mayoría de los casos es una conciencia débil. Esta debilidad es causada por limitaciones emocionales en forma de pensamientos y sentimientos débiles a lo largo de los años. Estos pensamientos y sentimientos se han expresado a veces sin que nos demos cuenta de cómo cada pensamiento y sentimiento está teniendo un poderoso efecto negativo en las situaciones que nos rodean. 

Además, siguen regresando negativamente a nosotros a largo plazo. Los límites los creamos nosotros mismos y no nos los impone la sociedad o las circunstancias, como algunos de nosotros podríamos pensar y parecer experimentar en el viaje de nuestra vida. 

Muchas veces decimos que me siento débil porque la siguiente persona me ha dominado toda mi vida. La persona dominante no es la causa de nuestra baja autoestima. Es la forma que le hemos dado a todas sus palabras y acciones en nuestra mente desde que estamos con él, es la causa de que nos veamos mal y nos sintamos poco seguros. 


Comentarios