Video: https://www.youtube.com/watch?v=SS_uzpbZcmc
Marcelo Bulk
En una historia muy antigua, muy contada y adaptada a diferentes culturas y sociedades, una persona millonaria cuestiona a un pescador quien se mecía en su hamaca. Su cuestionamiento partía del principio que la persona perdía su tiempo y debía estar allá en el mar, pescando. El hombre, de forma feliz y tranquila, respondió al millonario con la sencilla pregunta: ¿Por qué? El millonario le fue explicando hasta que al final dijo algo tipo: ¡Para que experimentes tranquilidad en la vida! A esto el hombre con una sonrisa le dijo: Pero si es esto que ya estoy experimentando...
Cuando nos esforzamos en un camino de autoprogreso, nos olvidamos de esta verdad absoluta, de que lo que realmente queremos es PAZ, TRANQUILIDAD, SERENIDAD y una tarde meciéndonos en la hamaca.
1. Lo primero es definir QUÉ realmente se quiere e incluir aspectos considerados "blandos", como la paz interior o armonía. Esta definición debe estar presente en el plan de autoprogreso.
2. Comprendamos que cualquier cambio personal que surja de la voluntad propia o de un proceso de reflexión, demandará esfuerzo. El tema es que el esfuerzo no sea tanto que te "rompa la espalda" de tu humanidad, ni tan largo que te sientas en el Polo Norte y solo veas oscuridad... Controla el esfuerzo en términos de intensidad y duración, y uno de los métodos es tener un coach que te ayude a entender mejor tu proceso personal.
3. Relacionado a los esfuerzos, otro grave riesgo es convertir el medio en fin, o sea, que el esfuerzo pase a ser el objetivo. Esto pasa porque muchas veces nos esforzamos demasiado para que algo suceda y perdemos de vista lo que realmente queríamos lograr. De vez en cuando, recuerda tu visión final, este objetivo brillante que te guía.
4. Vale la pena que de forma periódica o espontánea, el plan de autoprogreso sea revisado, pues puede necesitar ajustes, conversaciones con otras personas o tomas de decisión definitivas. Esto reforzará lo que realmente se quiere encontrar con este cambio profundo en el ser.
5. Incluye en tu rutina y en tu plan de autoprogreso, en lo posible, "breaks". Ellos pueden ser 10 minutos aquí y allá o dos días que desapareces del mapa terrestre, especialmente el mapa de las redes sociales, celulares y mensajería. El "break", con la intención de hacerte experimentar tranquilidad y armonía, es fundamental para el equilibrio de tu proceso de cambio personal.
6. Vale la pena conversar con personas inspiradoras y agradables quienes compartirán sus historias, darán consejos o harán presencia, aliviando tu corazón y disminuyendo la presión que puedas estar sintiendo.
7. Y si realmente experimentas presión, medita, pero enfócate principalmente en la relajación. La relajación es un arte y entrega muchos beneficios, especialmente a alguien que está en un proceso fuerte de autoprogreso.
8. Quiero terminar hablando un poco de la salud mental durante un cambio personal. El estrés, la ansiedad y la depresión son "fantasmas" y "sombras" que acechan a las personas en un camino de autoprogreso. ¡CUIDADO! Encuentra soluciones lo antes posible para evitar, mitigar o eliminar estas experiencias negativas, estos "fantasmas".
9. Ahora sí, terminemos con una palabra clave: GRATITUD. Al experimentar agradecimiento, naturalmente el ser siente, vive y transmite PAZ... Agradece, agradece mucho.
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