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La meditación y cómo resolver problemas (2)

Segunda parte

Cada vez es más difícil estar en el mismo lugar, en el mismo momento física, mental y emocionalmente. ¿Saben por qué es importante eso? Porque la mente que es la que genera pensamientos, es nuestra Interface, que nos permite relacionarnos con la vida. Básicamente la vida es un juego de la mente y si aprendes a respetar la mente, todas las áreas de tu vida mejorarán.

Piensa en una máquina que compras, con esa máquina recibes o puedes bajar un   manual, ese manual te explica cómo cuidar la máquina y cómo usarla de forma adecuada. ¿Dónde está el manual del usuario de la mente? ¿Cuánto tiempo por ejemplo deberías tu pensar sobre una cosa específica? ¿Cuándo dirías que pensaste lo suficiente? ¿Qué clase de pensamiento deberías tener en las mañanas? ¿Cómo hacer que tu mente duerma en la noche? Toda esa ciencia o arte de cuidar la mente no se está teniendo en cuenta hoy en día y debido a eso la mente se ha debilitado; cuando la mente está débil la paciencia baja, el nivel de tolerancia baja y va a ser difícil manejar e interactuar con personas diferentes a uno. Y no hay la fuerza de voluntad para hacer lo que es retador. Pero en la medida que aprendemos a respetar mejor la mente, ¿qué pasa? Comenzamos a ahorrar energía y esa energía que ahorraste va a ser útil para ti cuando hay desafíos más grandes en la vida.

Vamos a pensar en lo siguiente, ¿Cuántas palabras hablamos en un día? De todas esas palabras que hablamos ¿Cuántas realmente fueron útiles?
La mayoría de personas no saben escuchar y eso genera problemas en la comunicación, genera tensión en la mente. Cuando nosotros aprendemos a insertar la meditación dentro de nuestro estilo de vida, la mente se desacelera, se calma y la primera consecuencia positiva es que yo empiezo a escucharme a mí mismo. Si soy capaz de escucharme a mí mismo también puedo escuchar y comprender a otra persona.



Les sugiero destinar un tiempo por lo menos una vez al día, preferiblemente en la mañana o antes de acostarse para realizar un ejercicio llamado “La Sala silenciosa de paz”:
Siéntate de forma cómoda…
Toma algunos momentos para relajar tu mente, tu cuerpo…
 y pon tu atención en ti mismo
Concentra tu atención en tu rostro, tu cara…
Pon la atención en el centro de tu frente…  
Allí visualiza una salita pequeña…
Y ese espacio es tu sala silenciosa de paz…
Esa sala silenciosa de paz es tuya, es privada, es quieta… 
Y dentro de esa sala silenciosa, te sientes muy relajado…
Dentro de esa sala silenciosa de paz puedes soltar, dejar a un lado tus responsabilidades diarias…      
Y simplemente se tú mismo…   Que tu mente absorba esta atmósfera de tranquilidad… 
En la medida que lo haces tus pensamientos se desaceleran…  
La mente se calma…Permanece con este sentimiento en tu mente por un minuto…dos o hasta cinco.   Y gentilmente retorna a la conciencia de ese lugar donde estés.

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