Por Elsa María Fríes
Reconocer y aceptar la propia singularidad,
realizar que somos libres de ser lo que elegimos ser, a la vez que nos
acercamos a lo demás y trabajamos con ellos exitosamente, es el principio espiritual
del Raja Yoga, de lo individual y lo colectivo.
El punto de partida es la conciencia de ser almas, de ser seres espirituales únicos, cada uno con su propia identidad y con su propia trayectoria de experiencias que permiten aportar de un modo único y creativo en el tejido de la vida del grupo social.
El Raja Yoga de Brahma
Kumaris enfatiza la importancia de equilibrar lo individual y lo colectivo. A
nivel individual, hemos de cultivar la paz y la felicidad internas a través de
la meditación y la autorreflexión, sin embargo, esta paz interna no se mantiene
en aislamiento, se espera que contribuya positivamente a la paz y la felicidad
de la sociedad y del mundo en general.
La aplicación de este principio implica el reconocimiento de la verdad primaria de que uno no puede existir sin los demás, así se evitan las equivocaciones del narcisismo individualista que enajena y aísla, o del socialismo autócrata que oprime la libertad individal por la uniformidad del colectivo; así también se promueve la colaboración entre todos en equilibrio con la independencia del alma individual. Desde la perspectiva del grupo social se promueve el equilibrio entre el orden social y los derechos individuales.
Así como cuando las aves tienen que volar a
un clima más cálido en invierno, se reúnen y comienzan su viaje como un
colectivo..., yo aprecio mi singularidad a la vez que aprecio al colectivo…, el
éxito del viaje de la vida depende de esto…, ninguna ave sola puede llegar al
destino por sí misma..., ni puedo vivir mi vida en solitario…, sé que somos
inter - dependientes…, acepto y tolero a todos… equilibro mi auto-respeto con
el respeto por los demás… me siento parte del todo … y siento a todos como
parte de mi mismo… agradezco la contribución de todos al éxito de mi vida…
agradezco la oportunidad de contribuir en la vida de otros…
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