Video: https://youtu.be/pzvTT2fiF3s

Marcelo Bulk

Si hay una sensación de presión, falta de claridad o la experiencia de que falta fuerza, pero hay la clara visión de que este camino de autoprogreso es fundamental para el ser, entonces es importante que pongas en consideración ir a un retiro. Hay muchos tipos de retiro en varias formas y me concentro en tips para que escojas el mejor retiro, y cómo aprovecharlo. 1. Antes de embarcar en un retiro, identifica claramente los beneficios que esperas tomar y conversa con organizadores o personas que han estado en este retiro anteriormente si estos objetivos son realistas. Al empezar el retiro, recuerda a ti mism@ de estos objetivos y tenlos en mente todo el tiempo. 2. Los retiros se manifiestan de varias maneras, ¿cuál sería la mejor para ti y tus circunstancias presentes? Por ejemplo, si un retiro es presencial implica que tienes que disponer de tiempo para este fin exclusivamente, lo que quizá no sea práctico; retiros on-line ofrecen flexibilidad de tiempo y puedes escoger qué temas quieres asistir. 3. Otra variación es la distancia del retiro a tu casa u oficina. Puede ser útil que vayas a la India, pues esta distancia física facilitará la concentración y, consecuentemente, se tomará mucho beneficio. Sin embargo, si tienes deberes que no puedes postergar durante la práctica del retiro, un lugar más cercano será ideal, a pesar de no poder tomar el beneficio completo. En tal caso, como en el punto anterior, escoge los temas en los que realmente te quieres concentrar. 4. Al tener un conjunto de objetivos, esto permite un pragmatismo a la hora de escoger los temas de un retiro. Brahma Kumaris, por ejemplo, organiza 3 retiros internacionales valiosísimos y si vas a escoger encontrarás dos retiros altamente espirituales en la India, siendo uno en inglés y el otro en español, además de un retiro dirigido a líderes que sucede en varios países de Latinoamérica por turnos. El tema debe ser algo que, si bien sea atractivo, tenga que ver con lo que realmente quieres lograr. Piénsalo bien, antes de inscribirte a un retiro. 5. Por último, miremos los retiros desde tres aspectos del tiempo. La preparación es clave, tanto física como espiritual, pues estarás embarcando en una "aventura" y es importante que estés preparad@. Conversa con los organizadores e investiga bien qué pasará en el retiro. 6. Durante el retiro, toma provecho en la máxima extensión posible, pero evita dos actitudes básicas. a) La "síndrome de la televisión", donde asistes, te diviertes, pero realmente no estás asimilando nada... b) La "paradoja del estudiante", en la cual anotas todo, respondes las preguntas y soluciona las situaciones, pero no es algo que vivirás cuando salgas de ahí. Asimila lo que aprendas; vive lo que asimiles. 7. Después del retiro, conviene tomarse una semana para dejar que todo lo que asimilaste pase a ser parte de tu vida. Repasa los puntos, conversa con otras personas que ahí estuvieron (o no) y, en lo posible, sigue las recomendaciones que te dieron. Esto va a acelerar tu camino de autoprogreso. 8. En todo este proceso, GRATITUD debe ser algo presente en la actitud. Agradece cada sonrisa, cada palabra y cada pensamiento que este retiro te brinde.