Por Aruna Ladva
"Tengo fe en que la fuerza de la paz es más grande que la
bomba atómica, más grande que cualquier poder que el mundo pueda
producir".
Dadi Janki – directora General de Brahma Kumaris
Ah, es esa época del año otra
vez. ¡Parece aparecer más rápido cada año! Pero ¡Wow! ¡Qué año
hemos tenido! ¡Llamarlo extraño sería quedarse corto! Estamos en un
lugar donde nada es seguro y nada predecible ... y la disrupción, la
incertidumbre y la confusión aún continúan.
¿Eso es lo que está pasando en
el exterior? Pero, ¿qué está sucediendo en el interior, en nuestro mundo
interior? ¿Podemos todavía mantener cierto grado de compostura a pesar de
todas las arenas movedizas actuales?
Cuando nos tomamos un tiempo
para consolidar nuestro profundo sentido del yo, podemos encontrar la
paz. Definitivamente, esta no es la identidad propia impulsada por el ego,
sino la naturaleza inmutable más profunda del espíritu, y aquí es donde nos
resultará mucho más fácil seguir los tiempos cambiantes actuales.
Todos tenemos la oportunidad de
ver esta situación actual como una oportunidad, para restablecer nuestras vidas
y reconectarnos con nuestra humanidad común y Dios.
Durante el encierro, muchas
personas han sufrido de soledad y aislamiento, y la gente ha estado mirando sus
vidas y ahora puede ver lo que es realmente importante para ellos. No son
cosas, sino familia, amigos y esas conexiones personales.
Todos hemos sido llamados a
reflexionar sobre nuestras vidas durante la actual crisis mundial. Pero lo
más importante a tener en cuenta es no ser infectado por el virus del miedo.
Está bien, si en la medida de
lo posible, podemos permanecer en paz y mantener la calma. Después de
todo, la paz es la naturaleza original del alma. Comencemos a contar
nuestras bendiciones en la vida.
“Tu verdadera naturaleza original es de paz y
divinidad. Experimentar esto es estar convencido del valor absoluto de su
valor intrínseco.
Puedes enfrentar cualquier oposición con la fe de tus convicciones
".
Dadi Janki
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